REVOLUTION, cuando iberdrola nos corta la luz

Hoy que es lunes postelectoral, hablaremos de una serie que pasó a la historia el verano pasado.

Erase una vez una serie de televisión de ciencia ficción que tenía un punto de partida superinteresante pero supercomplicado de reflejar: una historia postapocalíptica en la que se va la luz y no existen ni la tele, ni internet, ni el comunio, ni el wasap!!!!!!!!!!!!! oh my god!!!!!!!!! , y que durante el primer año fue avanzando a trompezones a medida que se iba liando la madeja cada vez más, para la segunda temporada ganar realismo y mugre, matar gente,  pero sacrificar cada vez una historia que se había convertido en rocambolesca, con continuos giros de guión que cada vez tenían menos sentido y han acabado con cepillarse a la serie.

Que no tengais una desbrozadora no significa que no se pueda podar un poquito (estos decorados me suenan a un videojuego, the last of us, a ver si he metido el remo...)

Esa serie se llamaba Revolution y ha acabado hace dos días como el que dice, aunque ahora en verano a lo mejor la repesca algún canal de mediaset. La historia arranca un buen día que gracias a un experimento de los militares yankis se les va la mano y plof!!! se apagan las luces, esto es, se acaba la electricidad y no tiene pinta de que iberdrola la vuelva a conectar. Bueno, partiendo de la base de que científicamente eso es IMPOSIBLE, porque la electricidad existe en la atmósfera terrestre igual que los campos magnéticos y sin ella nuestro cuerpo no funcionaría (no me refiero a que no nos funcione el i-phone, es que no nos marcha la patata), bueno, contando con la dosis de ficción suficiente la historia es cuando menos ambiciosa: El Gran Apagón, gente desesperada, luchando por un litro de agua y un cacho de hamburguesa, el caos, el fin de la civilización... Pues la serie pasa por encima de eso de puntillas y lo que nos cuenta es quince años después como los EEUU (parece que el resto del mundo nunca tuvo luz y viviamos en cuevas) viven como los amish, en paz y armonía si no fuese por unas milicias sacadas de la guerra civil, que vienen a joder de vez en cuando a los campesinos. Unos campesinos por cierto que van aseadíiiiiiiiiiiiiiiisimos, con los dientes blanquíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimos y una ropa y peinados super mega guays, todos son guapíiiiiiiiiiiiiiisimos y están super sanos, en fin lo que hace el campo.

Quince años el gordo con la misma camiseta de AC/DC, anda que estará cojonuda, se aprecia lo bien que la sienta el cuero a la prota

Algún actor es medio conocido por otras series y los personajes se van alternando, así como algunos flashback que son lo mejor de la serie y que nos cuentan las motivaciones de cada uno, porque uno era bueno y se hace malo, porque otro es malo desde siempre...
A partir de aquí se lía el asunto sobremanera, resulta que existen unos pen drive que son una especie de microgeneradores y pueden dar energía, luego el malo malísimo envía a otro peor aún a matar a los buenísimos que por supuesto tienen los pendrive, que sin embargo obtienen ayuda de un tipo-duro-de-buen-corazón que era antiguo compinche del malo,.... no falta un gordo con gafas y una femme fatale y así tópico tras tópico van alternando aventuras a cual más chorras mientras se dan unas caminatas por los EEUU que ya quisieran los de The Walking Dead. Luego resulta que la luz se fue porque se activó una nanotecnología que habían inventado los protas, y en la segunda temporada la nanotecnología la lía parda (pero parda) y encima vuelven los auténticos EEUU (los patriotas) que resulta que son aún mas malos que los otros malos, un malo parece bueno un episodio pero luego le da ventolera y es otra vez malo (sin más explicaciones).... en fin, un rollo macabeo, aunque es cierto que la segunda temporada la serie gana realismo y crudeza, empieza a morir gente importante y ya por lo menos llevan el pelo sucio y van sin afeitar, y se cargan un par de protas, pero ni con esa se salva.

Como no hay para balas pues a hostiazo limpio

En resumen, una historia postapocalíptica que tiene sus puntos buenos pero que llega a ser tan enrevesada que ya no saben ni como salir del lío en que se han metido. Recomendable para ver tomando una cocacola y unos ganchitos pero poco más, demasiados fallos de guión y demasiadas bolas que tragar hacen que no sea una serie para engancharse, aunque yo me tragué todos los episodios, es lo que tiene ser fan de la ciencia-ficción, o como diría mi viejo: Tonterías!!!!!!!!!

PD por lo menos es mejor que la mierda de Terra Nova del verano pasado y de la hablaré el día que nos lleguemos por la T